Habitantes de Naiguatá bailaron al son de los tambores en honor a San Juan pese a la «radicalización» de la cuarentena en Venezuela.
Los congregados dijeron no querer perder la cultura y la tradición pero exponen su vida a contraer fácilmente el coronavirus.
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Venezuela tiene más de 4.000 casos y 36 muertes por coronavirus según el régimen de Nicolás Maduro que estableció una semana de «radicalización» de la cuarentena.
Además, funcionarios de la Guardia Nacional han procedido a sancionar con multas a aquellos ciudadanos que no lleven puesto su correspondiente tapaboca en el litoral.
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