Elizabeth Ostos
En la comunidad financiera de Florida persiste la preocupación por el efecto de las sanciones impuestas por el gobierno de Estados Unidos al régimen de Venezuela, en particular en cuanto a cómo trabajar con clientes de esta nación sudamericana: empresas y personas naturales.
En entrevista exclusiva con Descifrado, la abogada Patricia Hernandez miembro del consejo de administración y ex consejero General de la FIBA (Asociación Internacional de Banqueros de la Florida), explica la posición de esa institución.
-¿Cómo han afectado las operaciones de los bancos de Florida las sanciones americanas contra el régimen de Maduro?
-Desde las primeras sanciones hace más de dos años, los bancos en la Florida se han visto obligados a desarrollar una estructura de controles para poder asegurarse que no permiten transacciones en violación de las sanciones. Como éstas han evolucionado, los bancos han tenido que modificar los controles cada vez qué hay una modificación en las sanciones. Esto ha aumentado los costos de cumplimiento enormemente y en algunos casos los bancos han tomado la posición de rechazar cualquier transacción proveniente de Venezuela o con algún vínculo a Venezuela. En otros casos los bancos están revisando manualmente cada transacción relacionada con ese país y eso causa demoras y un costo muy elevado, en particular con los bancos que tienen una clientela importante venezolana.
-¿Cómo han afectado las sanciones a los clientes de Venezuela, empresas y cuentas personales? ¿Qué tipo de empresas han sido perjudicadas con cierre de cuentas corporativas?
-Las sanciones más recientes tienen dos componentes principales. Primero, las empresas que hacen transacciones con el gobierno de Venezuela se han visto que dichas transacciones están sujetas a escrutinio por los bancos y en ciertos casos algunas de ellas son bloqueadas o rechazadas. También, estas mismas empresas se han visto con las cuentas cerradas o con unas opciones muy limitadas para poder recibir fondos relacionados al Gobierno.
“En casos de individuos – prosigue la abogada Hernandez las sanciones más recientes han creado un complicación ya que la última definición de “Gobierno de Venezuela” incluye a individuos que trabajen para el Gobierno en cualquier puesto, incluyendo dependencias del mismo y sus empresas y filiales. Estas personas quedan bloqueadas y tienen que obtener una licencia de la OFAC (Oficina del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos) para liberar sus fondos”.
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-¿Qué iniciativas han tomado la Fiba para atender las preocupaciones de los bancos de Florida con clientes de Venezuela?
-Como resultado de unos esfuerzos muy fuertes por la industria bancaria en Miami a través de la FIBA frente a la OFAC, esta definición excluye a los individuos que ya no son empleados del Gobierno o esas personas que son empleados del mismo pero son ciudadanos o residentes permanentes de EE.UU, o tenedores de una visa para poder entrar en los EE.UU. También excluye personas relacionadas al Gobierno de Juan Guaidó.
Añadió que “en muchos casos los clientes aunque no queden bloqueados se han visto sin acceso a sus cuentas por que han quedado restringidas mientras el banco investiga los particulares del cliente para determinar si se deben de bloquear. Esto ha causado preocupación y confusión en los clientes. Desafortunadamente no le queda remedio a los bancos (bloquear las cuentas) ya que las penalidades son severas por cada violación de las sanciones.
-¿La FIBA tiene un número estimado de cuentas cerradas de empresas y personas de Venezuela o relacionadas con Venezuela?
-Aunque no hay números formales pero me imagino por mi experiencia con los bancos a quien yo asesoro que deben de ser por lo menos 1,000 o más cuentas cerradas solamente en Miami.
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