La población venezolana se encuentra angustiada ante el descomunal y sistemático aumento en el alquiler de la vivienda, en el mercado informal, pues los propietarios de los inmuebles hacen caso omiso al decreto presidencial de suspender por seis meses del pago de alquileres de comercio y viviendas.
Los inquilinos se encuentran dispuestos a cancelar la renta todos los meses pero a montos razonables con sus ingresos, pero los propietarios no lo aceptan.
Carmen Teresa Zambrano, es una enfermera larense, que ocupa, en calidad de inquilina, una habitación en una quinta ubicada en la urbanización el Márquez en Caracas donde, asegura le aumentan hasta el 100% la renta cada mes.
“Todos padecemos al crisis que vive el país, pero no todos son solidarios, A mi casera no le interesa cuanto es mi sueldo, solo quiere que le pague lo que ella considera justo cada mes. Hace dos días me amenazó con sacar mis corotos a la calle si no logro cancelar a tiempo los 5 millones 500 mil bolívares de renta que me toca este mes”, expresó.
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La misma situación se repite con el motorizado Rodolfo Carmona, en un barrio de Artigas, donde por inmueble de una habitación sencilla, sin muebles, con fallas en el servicio eléctrico y donde el servicio del agua, solo la ponen una vez a la semana el arriendo ya alcanza los 4 millones de bolívares, pero en abril el monto alcanzó Bs. 1.800.000,00.
“Hay mucha indolencia por parte de los arrendatarios, Yo como trabajador me tengo que rebuscar haciendo de mototaxi en horas de la noche para poder redondearme la arepa, mi sueldo es el básico, solo nos aumentaron 400 mil bolívares que no me alcanza ni para comprar un cartón de huevos”., expresa Carmona.
Y añade que sus dos preocupaciones en estos momentos son; comprar alimentos y pagar el arriendo y rogando a Dios porque no se dañe la moto porque la situación sería peor.
Cabe destacar que en el 23 de Marzo del presente año, en medio de la pandemia por el Covid-19, Nicolás Maduro emitió el decreto 4164 en el que se suspenden hasta por 6 meses el pago del alquiler de comercio y viviendas.
La Cámara Inmobiliaria de Venezuela, que agrupa al sector formal, explicó en su momento que en el artículo 3 del referido decreto plantea la posibilidad de acordar, mediante consenso entra las partes, el pago o restructuración del pago del alquiler lo que permite negociar de buena fe el pago de alquileres.
El gremio asegura que en algunos casos esta negociación podría derivar en el pago completo del alquiler de forma regular, en el caso que el inquilino pueda hacerlo, tomando en cuenta que en la mayoría de los casos los arrendadores viven de los alquileres.
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