El presidente Nicolás Maduro dijo este martes que “estén pendientes a finales de esta semana o la próxima, que habrá sorpresitas con el carnet de la patria para las navidades felices”.
El carnet de la patria fue creado en enero de 2017, y actualmente cuenta con 18 millones 396 mil 476 registrados, lo que permite al Gobierno Nacional conocer y atender los requerimientos de los venezolanos.
Una investigación de Angus Berwick en Caracas publicada por Reuters, revela que la base de datos del carnet de la patria almacena información personal de los miembros como su presencia en redes sociales, membresía de un partido político y si la persona votó.
El gigante chino de telecomunicaciones ZTE está ayudando a Venezuela a construir un sistema que supervise el comportamiento de los ciudadanos a través de una nueva tarjeta de identificación. El «carnet de la patria», que ya está siendo usado por el Gobierno para rastrear votos, preocupa a algunos.
En abril de 2008, el entonces presidente venezolano Hugo Chávez envió a funcionarios del Ministerio de Justicia a visitar a sus homólogos en el centro de tecnología chino de Shenzhen.
La misión era conocer el funcionamiento del programa nacional de documentos de identidad de China, según dijo un miembro de la delegación venezolana. Pero una vez en Shenzhen, los venezolanos se dieron cuenta de que una tarjeta podía hacer mucho más que solo identificar al dueño del documento.
En la sede del gigante chino de telecomunicaciones ZTE Corp, la delegación aprendió cómo China, mediante el uso de tarjetas inteligentes, estaba desarrollando un sistema que ayudaría a Pekín a seguir el comportamiento social, político y económico.
«Lo que vimos en China cambió todo», dijo el asesor técnico Anthony Daquin, miembro de aquella delegación venezolana. Su asombro inicial, dijo, se volvió gradualmente en temor de que un sistema así pudiera llevar a cometer abusos contra la privacidad de las personas en Venezuela. «Ellos buscaban tener el control de los ciudadanos», agregó.
Al año siguiente, cuando Daquin confesó sus preocupaciones a funcionarios venezolanos, fue detenido y extorsionado por agentes de inteligencia, dijo el asesor a Reuters. Le rompieron varios dientes al golpearlo con una pistola y lo acusaron de «traidor», aseguró Daquin, quien dijo que por eso huyó del país.
Portavoces del gobierno venezolano no hicieron comentarios sobre la versión de Daquin.
El proyecto languideció, pero casi 10 años después de aquel viaje a Shenzhen, Venezuela lanzó una nueva tarjeta de identificación inteligente conocida como «carnet de la patria».
La tarjeta transmite datos de sus titulares a servidores de computadoras. El carnet está cada vez más vinculado a la entrega de alimentos subsidiados, salud y otros programas sociales del gobierno, de los que depende la mayoría de los venezolanos para sobrevivir.
Y ZTE, cuyo papel en el proyecto de la patria se detalla aquí por primera vez, está en el corazón del programa.
Como parte de un esfuerzo oficial de 70 millones de dólares para reforzar la «seguridad nacional», Venezuela contrató el año pasado a ZTE para armar una base de datos con los carnets y crear un sistema de pago móvil para usar con la tarjeta, según contratos revisados por Reuters.
Un equipo de empleados de ZTE ahora funciona dentro de una unidad especial de CANTV, la compañía estatal de telecomunicaciones de Venezuela que administra la base de datos, según dijeron cuatro empleados actuales y anteriores de CANTV.
El carnet de la patria genera preocupación entre algunos ciudadanos y grupos de derechos humanos que creen que es una herramienta para que el gobierno del presidente Nicolás Maduro monitorice a la población y reparta los escasos recursos entre sus leales.
«Es un chantaje», dijo Héctor Navarro, uno de los fundadores del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela y exministro de Chávez, sobre el programa del carnet de la patria. «Los venezolanos que tienen el carnet de la patria tienen más derechos que los que no lo tienen», agregó.
La investigación completa aquí