Sin pollo están los mercados populares de San Cristóbal

Según alertan solo quedan en Táchira unos 20 mil pollos, y más de 130 granjas han cerrado por completo y actualmente operan 10.

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La regulación del precio del kilo de pollo a 23.500 bolívares por parte del Gobierno Nacional agravó aún más la situación caótica que venían padeciendo los productores, hasta el punto que según Rafael Moreno, las granjas han cerrado por la carestía para criar las aves, pues están produciendo a pérdida.

Afirmó que  no había pollo en los mercados populares de San Cristóbal; y la situación será peor para diciembre, porque en los criaderos no hay pollitos bebés y sólo quedan en el Táchira unos 20 mil pollos, con sólo 10 granjas “batallando” y más de 130 cerradas por completo, según publica hoy el diario La Nación.

Dijo que en la actualidad, los productores sólo cuidan sus granjas para que no les roben  los comederos y bebederos: “Pero tenemos que hablarle claro a la gente: no hay pollo; y cada vez más se pondrá más difícil tener este vital alimento, porque un bulto de alimento pasa del millón de bolívares y las medicinas ni se consiguen”.

—No estamos alarmando a nadie, porque esa es otra, uno dice la verdad de lo que está pasando y lo tratan de alarmista. La prueba es que en este momento el pollo está “volando”, no se consigue en carnicerías  ni en mercados porque no lo están trayendo de otros estados y el que teníamos en el Táchira se acabó, porque los productores estamos trabajando a pérdida- destacó Moreno.

Repuso que la avicultura en el estado quedó totalmente dañada, “porque  la regulación del precio del pollo no fue consultada. Se colocó el precio allí de manera populista, sin ver la realidad, ya que no hay cómo producirlos. Por eso, de las 143 granjas sólo quedan 10; y de los 116 mataderos en el país, sólo existen 12”.

Mercados sin pollo

En un recorrido por los principales mercados municipales de San Cristóbal se pudo constatar que la venta de pollo era nula. Los carniceros dijeron que tenían más de un mes que no hacían pedido porque los distribuidores no aceptaban el precio regulado y “nadie está dispuesto a ser sancionado ni trabajar a pérdida, ya que si ese fue el precio que colocaron  y uno no cumple, los sancionados somos nosotros los vendedores. Por eso, pues no habrá pollo, a menos que la gente lo pague al precio que tienen los supermercados, donde sí lo venden por piezas a 55 mil bolívares el kilo de muslo, por ejemplo”.

Aseguran que la situación es crítica y que muy probablemente si el Gobierno no toma cartas en el asunto, desaparecerá definitivamente el pollo del plato de la mesa de la familia tachirense.