En la primera evaluación médica del bebé se valoran los datos antropométricos (peso, talla, perímetro cefálico), las condiciones del parto, adaptación al medio externo y si hay necesidad de maniobras adicionales u hospitalizaciones
Al momento del parto normal se viene de un proceso diagnóstico previo del embarazo en donde se sabe si el bebé tiene o no alguna malformación. Antiguamente los bebés al nacer pasaban rápidamente al retén y se mantenían allí por lo menos tres horas bajo observación del neonatólogo, quien verificaba que no tuviera malformaciones u otro tipo de problemas.
El ginecobstetra del Grupo Médico Santa Paula (GMSP), doctor Carlos Hernández, indicó que “hoy en día, con el avance del diagnóstico prenatal, se sabe exactamente cómo viene un bebé y ya no tiene que necesariamente estar esas tres horas con el neonatólogo”.
El especialista señaló que, al momento del parto, en el GMSP hay una habitación sumamente amplia, con una estación de recién nacido, donde está presente el pediatra neonatólogo al momento de nacer el bebé, de manera que cualquier complicación o problemas que se presente puede atenderlo inmediatamente.
Además, la terapia intensiva está a pocos metros, de manera que si hay algún tipo de emergencia también se puede llevar allí al recién nacido inmediatamente, para algún tratamiento complejo.
El doctor Hernández explicó que, en la primera evaluación médica del bebé se valoran los datos antropométricos (peso, talla, perímetro cefálico), las condiciones del parto, reflejos, adaptación al medio externo y si hay necesidad de maniobras adicionales u hospitalizaciones.
Otros datos
En la primera consulta del recién nacido también se evalúa a la madre, se le hace un examen físico de las mamas (senos) y sobre la técnica de lactancia materna, roles de los otros miembros de la familia y muchos temas más.
“Hay un sistema que se llama APGAR que verifica todo lo que es esfuerzo respiratorio, frecuencia cardíaca, color de la piel, reflejos y tono muscular. Una serie de parámetros que el neonatólogo estará evaluando en el recién nacido”, agregó el especialista.
Por otro lado, también hay un esquema para el estudio audiológico de bebés recién nacidos, que permite observar si presentan alguna deficiencia auditiva, ya que cuando el niño nace los padres obtienen exámenes de laboratorio y evaluación pediátrica, y se puede saber que ve en los primeros días, pero no se sabe si escucha.
Los problemas auditivos se pueden detectar en los recién nacidos de forma sencilla y rápida utilizando el equipo con el que cuenta el GMSP, de Emisiones Otoacústicas, método que mide las ondas sonoras producidas en el oído interno.
El GMSP, apoyado por su casa matriz Keralty, trabaja para brindar acceso cada día a más personas, en modernas y cómodas instalaciones, en quirófanos equipados con tecnología de punta, de las mejores marcas, y contando con un equipo médico y asistencial profesional de alta calidad, por eso ya es ‘la clínica que las personas tienen en mente’.
nota de prensa
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