El gobernador Ron DeSantis está a punto de escoger las personas que dirigirán o supervisarán los parques temáticos de Disney en el área de Orlando.
Esta controversial medida, otorgaría al mandatario regional una mayor autoridad sobre la empresa que más trabajos otorga en toda Florida, y le hará ganar también un encarnizado enemigo político reciente.
Fuentes no confirmadas en el grupo empresarial del entretenimiento, han señalado que aunque el tema no se ha tocado de manera pública, varios directivos han pensado en la posibilidad de vender las instalaciones y emigrar a otro estado.
Esto podría ser un golpe muy duro para el turismo y las finanzas del estado suroccidental, que vive en más de un 90% del turismo.
Los legisladores republicanos presentaron un proyecto de ley para entregar el control del distrito fiscal especial de Disney, llamado Reedy Creek Improvement District, a una junta de cinco miembros elegidos por DeSantis.
La propuesta también viene con un cambio de nombre; Reedy Creek se convertiría en el «Distrito de Supervisión de Turismo de Florida Central».
De Santis vs Disney
El movimiento para hacerse cargo de Reedy Creek es el último paso en una disputa de un año entre DeSantis y Disney sobre un proyecto de ley para restringir ciertas normas en el aula sobre la orientación sexual y la identidad de género.
DeSantis firmó el proyecto de ley a pesar de las objeciones del entonces CEO de Disney Bob Chapek.
En un acto que los opositores calificaron de retribución política, DeSantis presionó a los legisladores para que disolvieran el Distrito de Mejora de Reedy Creek, que durante 55 años dio a Disney el control efectivo de los terrenos alrededor de sus propiedades en Florida.
Los republicanos, que controlan los escaños del poder legislativo, cumplieron, y el distrito estaba programado para desaparecer el 1 de junio.
Pero el proyecto de ley otorga nueva vida al distrito fiscal y mantiene muchos de sus poderes especiales.
De hecho, la página final del proyecto de ley de 189 hojas dice claramente: «El Distrito de Mejora de Reedy Creek no se disuelve a partir del 1 de junio de 2023, sino que continúa en pleno vigor y efecto bajo su nuevo nombre».
¿Y si Disney se va de Florida?
En una declaración a CNN, Jeff Vahle, presidente de Walt Disney World Resort, dijo que la compañía está «monitoreando la progresión del proyecto de ley, que es complejo dada la larga historia del Distrito de Mejora de Reedy Creek.»
«Disney trabaja con distintos modelos y jurisdicciones en todo el mundo, e independientemente del resultado, mantenemos nuestro compromiso de ofrecer una experiencia de la máxima calidad a los millones de huéspedes que nos visitan cada año.»
El proyecto de ley, presentado por el representante estatal Fred Hawkins, también pretende limitar el daño que podría causarse a Disney, uno de los motores turísticos más vitales del estado, y a los contribuyentes.
Deja claro que los cambios en Reedy Creek no deben afectar a la deuda existente del distrito, estimada en unos 1.000 millones de dólares, ni a ningún otro contrato.
El año pasado, los gobiernos locales expresaron su preocupación por que la disolución de Reedy Creek pudiera suponer una deuda impagable para los residentes de los condados de Orange y Osceola.
Reedy Creek, en una declaración a los tenedores de bonos el año pasado, dijo que el estado no podía disolverlo sin pagar su deuda, o violaría una ley estatal de 1967.
La legislación también eliminaría algunos poderes de la junta, como la capacidad de construir un aeropuerto o una central nuclear.
Los demócratas criticaron la legislación, que se introdujo en una sesión especial convocada en parte para abordar el futuro de Reedy Creek, aunque no llegaron a respaldar el acuerdo único de Disney en Florida Central.
El senador estatal Jason Pizzo, demócrata de Miami, dijo que Disney «no es una víctima simpática en mi libro», citando la reciente lucha laboral de la empresa con los trabajadores sindicalizados en Disney World.
«Eel mercado debería dictar estas situaciones» y comparó la intervención de DeSantis en una empresa privada con el «socialismo».
La representante estatal Anna Eskamani, demócrata de Orlando, dijo del proyecto de ley: «Disney sigue recibiendo prebendas, pero ahora es un prisionero político del gobernador».
DeSantis apoya los cambios, que probablemente se aprueben en la legislatura controlada por los republicanos en las próximas dos semanas.
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