Sin señal: estatal venezolana de telecomunicaciones (Cantv) apenas conecta al país

Según el índice Speedtest Global, Venezuela está entre los cinco países con la peor calificación en cuanto a la velocidad de conexión de banda ancha y móvil.

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2025

Cuando Ceferino Angulo escuchó gritos y disparos una noche el año pasado cerca de su granja lechera venezolana, trató de llamar a la policía. Pero el teléfono no tenía señal. A Angulo no le sorprendió.

Una torre telefónica, construida en su terreno por la estatal Compañía Anónima Teléfonos de Venezuela (CANTV) para brindar cobertura al área local fuera de la ciudad de Barinas, al oeste venezolano, había dejado de funcionar, según reseña un trabajo de la agencia Reuters.com .

La torre, situada en una ondulante pradera de su granja de unas 23 hectáreas, ahora está cubierta de enredaderas que serpentean sus postes.

La caseta de vigilancia de la instalación fue abandonada hace casi una década y ningún empleado de CANTV la ha visitado en tres meses, dijo Angulo, de 54 años.

“Llevamos cuatro años incomunicados. Señal es una de las cosas que más necesitamos”, dijo.

Más de una década después de que el gobierno nacionalizó la empresa, surgida hace 88 años, la inversión se secó, el personal calificado ha salido del país y los ladrones saquean los equipos, según una docena de empleados actuales y antiguos de CANTV y documentos internos.

Las empresas tienen dificultades en completar sus operaciones porque las líneas telefónicas han dejado de funcionar, empeorando una crisis marcada por cinco años de recesión que ha golpeado duramente la economía.

Algunas personas también tienen problemas para acceder a páginas web en las que se solicita una cita para sacar un nuevo pasaporte, por ejemplo.

Una portavoz de CANTV declinó hacer comentarios y el presidente de la empresa estatal, Manuel Fernández, no respondió a los correos electrónicos y mensajes de texto.

El año pasado, Fernández dijo en un portal oficial que CANTV era un “poderoso instrumento” para ofrecer acceso a las telecomunicaciones a los venezolanos y construir el Estado socialista. El acceso a Internet se ha cuadruplicado desde el 2007, agregó.

Sin embargo, las conexiones de teléfonos celulares son intermitentes en Venezuela y la gente reporta cada vez más cortes de red, en fallas que el gobierno atribuye a “saboteadores de la derecha”.

Barinas, donde el fallecido presidente venezolano Hugo Chávez vivió y estudió en su juventud, ha sido una de las áreas más afectadas por el deterioro de CANTV. En algunos sitios la cobertura se ha perdido completamente.

Oxidados vehículos de servicio permanecen abandonados afuera de la sede local de CANTV, ya que la empresa no puede comprar neumáticos o baterías nuevas, dijeron a Reuters empleados y exempleados.

Las propias oficinas de CANTV a menudo pasan días sin internet, agregaron empleados.

Algunos de los viejos circuitos eléctricos que proveían internet a las casas de Barinas no han sido reemplazados desde principios de la década de los 90 y varios residentes dijeron que han pasado más de un año sin conexión.

“Hay una crisis de inversión”, dijo José Luis Machín, exalcalde de Barinas.

Un técnico de CANTV que llevó a Reuters a una gira para ver la infraestructura de la empresa en Barinas dijo que la noche anterior se habían robado más de 100 metros de cable de cobre de un puente, cortando la conexión de un vecindario.

Los ladrones derriten el cobre o incluso venden los cables a CANTV, dijeron el técnico y otros dos empleados.

Para los servicios de telecomunicaciones, los cerca de 300.000 residentes de Barinas ahora dependen de distribuidores de redes construidos en los últimos años por las empresas de telecomunicaciones chinas ZTE y Huawei.

En una cuadra, un distribuidor de ZTE es considerado tan valioso que una guardia del grupo Milicia Bolivariana Nacional -brazo de la Fuerza Armada nacional Bolivariana- dijo que había sido colocado allí para protegerlo de los vándalos.

“CONGELADO EN EL TIEMPO”

CANTV, fundada en 1930, fue renacionalizada por Chávez en 2007 para consolidar su revolución socialista.

La compañía fue una vez líder en el sector de América Latina. Era propiedad mayoritaria del gigante estadounidense Verizon y cotizaba en la bolsa de Nueva York.

Invirtió cientos de millones de dólares en nuevas tecnologías cada año, atrajo a los mejores talentos y les pagó generosos salarios, dijeron los exempleados.

Desde la nacionalización, los empleados actuales y anteriores dijeron que CANTV ha llenado miles de vacantes con personal no calificado, que había dejado de actualizar sus servidores y que el mantenimiento de su red de fibra óptica se había detenido, causando interrupciones de servicio cada vez más frecuentes.

Fernández dijo el año pasado que, antes de su nacionalización, CANTV era una compañía elitista controlada por Estados Unidos, que se llevó sus ganancias en lugar de invertirlas en Venezuela.

Según el índice Speedtest Global, Venezuela está entre los cinco países con la peor calificación en cuanto a la velocidad de conexión de banda ancha y móvil.

CANTV tenía 2,45 millones de suscriptores de internet, unos 7 millones de suscriptores de línea fija y casi 14 millones de suscriptores móviles para fines de 2015, según datos internos de Reuters. Venezuela tiene una población que ronda los 32 millones de personas.

Los salarios actuales están por debajo de los 8 dólares al mes y la paga a menudo llega tarde.

Las personas que se opusieron al gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) no obtuvieron promociones, dijeron.

Es “como si esta empresa estuviera congelada en tiempo”, dijo José María de Viana, ex presidente de la unidad de teléfonos móviles de CANTV.

La empresa publica pocos detalles sobre sus finanzas, pero una copia, vista por Reuters, de sus resultados privados para el período de enero a octubre de 2016 muestra que la compañía ya no puede financiarse.

Le faltaron 2.720 millones de bolívares, para ese entonces el equivalente a 1,8 millones de dólares, para cumplir con su objetivo de inversión y necesitó 390 millones de bolívares de “fondos externos” para ayudar a cubrir el déficit, muestra los documentos.

Entre 2013 y 2016, la nómina de pago de CANTV para sus 15.000 empleados se cuadruplicó cuando el gobierno elevó los salarios para compensar la inflación, mostró el informe, visto por Reuters.

Dos ejecutivos con acceso a los datos de la compañía, que renunciaron en los últimos meses, dijeron que CANTV debe solicitar fondos al Banco Central para pagar a su personal.

La compañía también sufre por la insistencia del gobierno de mantener sus tarifas bajas y que equivalen actualmente a menos de un dólar por mes.

CANTV dependía de los acuerdos con ZTE y Huawei para el suministro de equipos y personal, y se pagó a las empresas en dólares del Fondo Conjunto China-Venezuela, un programa de financiamiento bilateral, dijeron empleados y extrabajadores.

La telefónica estaba enviando a sus empleados a China para recibir capacitación, agregaron.

El presidente Nicolás Maduro ha recurrido a ZTE, en particular, para implementar proyectos de tecnología.

La semana pasada, Reuters informó sobre el rol de ZTE en el desarrollo de una nueva tarjeta de identificación inteligente conocida como “carnet de la patria” que los críticos dicen que Maduro está usando como una herramienta para monitorear a la población y asignar los escasos recursos del país a las personas que su gobierno considera más leales.

Su Qingfeng, jefe de la unidad de Venezuela de ZTE, dijo en una entrevista telefónica que la empresa no era el proveedor más grande de CANTV y no recibió ningún trato preferencial con los contratos.

Un portavoz de Huawei declinó comentar sobre su relación con CANTV.

Incluso el sindicato oficialista de CANTV se queja de los “graves problemas” de la compañía.

El año pasado, en una carta privada a los miembros del sindicato, su presidente José David Mora, escribió que CANTV no podía mantener su red ni obtener nuevos vehículos y herramientas debido a la falta de moneda extranjera, y que la compañía estaba muy endeudada con las empresas chinas.

Mora destacó “la negativa disimulada para atacar frontalmente a la corrupción, generando la más grosera impunidad con el apoyo sistemático a quienes han desangrado a la empresa”.

El sindicato Fetratel no respondió a las solicitudes de comentarios.

Reporte adicional de Francisco Aguilar en Barinas, Andreína Aponte en Caracas y Anggy Polanco en San Cristóbal, Editado en español por Vivian Sequera y Juana Casas