Países condenan elecciones presidenciales sin garantías y tres naciones no reconocerán su resultado

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Cortesía Cancillería de Chile

La convocatoria a elecciones presidenciales antes del 30 de abril, por parte de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) ha el generado el rechazo y la condena de 15 países de America Latina, así como de la Unión Europea.

La mayoría de estos países ya desconoce a la ANC y ante este anuncio en medio del diálogo entre Gobierno y oposición, sumado a la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que prohibe la validación de la tarjeta de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), las naciones consideran que no existe confianza ni garantías de un proceso electoral transparente.

Estados Unidos (EEUU), Colombia y Argentina son los tres países principales que ya han anticipado que no reconocerán los resultados.

«Nuestra posición y la posición de la comunidad internacional es muy clara. Estas elecciones serán ilegítimas, los resultados no serán reconocidos«, dijo este jueves  un alto funcionario del Departamento de Estado de EEUU.

Por su parte, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos dijo: «Infortunadamente, Venezuela se convirtió en una dictadura. Venezuela está sufriendo una crisis que nadie se imaginaba que un país tan rico pudiese sufrir». Además de asegurar que no reconocerá los resultados por la falta de garantías, hizo un llamado a la comunidad internacional a hacer lo mismo.

Mauricio Macri, presidente de Argentina, dijo el día de ayer en una entrevista que «Maduro ha tomado el pelo a toda la región y al mundo entero, ha generado optimismo con intermediaciones de líderes de todas partes del mundo, pero lo único que ha hecho es seguir avasallando los derechos humanos”.

Grupo de Lima exige garantías y participación de observadores internacionales

Los países que integran el Grupo de Lima: Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Guyana, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía, rechazaron el pasado martes el anuncio de la ANC.

Tras la reunión que mantuvieron cancilleres y representantes de estos países, firmaron una declaración que exige “que las elecciones presidenciales sean convocadas con una adecuada anticipación, con la participación de todos los actores políticos venezolanos y con todas las garantías que corresponda, incluida la participación de observadores internacionales independientes”.

Por su parte, el canciller de Chile, Heraldo Muñoz declaró que esta convocatoria a elecciones en medio de una crisis política y sin cumplir con los estándares internacionales, hace que su país se cuestione su participación como mediador en el diálogo entre Gobierno y oposición.

Unión Europea sigue dispuesta a tomar otras medidas

«Las elecciones deben basarse en un calendario electoral viable, acordado en el contexto del diálogo nacional con todos los actores y partidos políticos relevantes, todos los cuales deben asumir sus responsabilidades», declaró la Unión Europea en un comunicado en el que además de rechazar la convocatoria a elecciones presidenciales, condena la expulsión del embajador de España en Caracas.

La tensión entre Venezuela y la UE ha crecido las últimas semanas, luego de que se dieran a conocer las sanciones contra altos funcionarios del Gobierno de Nicolás Maduro, en los que están el diputado constituyente y vicepresidente del Psuv, Diosdado Cabello, el presidente del TSJ, Maikel Moreno, el ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Néstor Reverol y la presidenta de Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena.

Diosdado Cabello, quien leyó el decreto de la ANC en plenaria, aseguró tras las sanciones de la UE que «si el mundo quiere aplicar sanciones nosotros aplicaremos elecciones».

La UE declaró que se mantiene atenta de la situación y que está dispuesta a tomar «medidas adecuadas a la luz de los acontecimientos y continuará utilizando todos sus instrumentos para fomentar soluciones democráticas».

Si las elecciones no son reconocidas

El resultado de las elecciones presidenciales podría ser un punto decisivo no solo para la política nacional sino para la internacional, pues si el nuevo Gobierno no cuenta con el reconocimiento de países, esto podría afectar sus relaciones diplomáticas, así como sus relaciones comerciales.

Todavía queda por ver qué sucederá si los países desconocen los resultados electorales, cuál será la respuesta del Gobierno electo, cómo afectará la economía nacional y la venta de petróleo, principal ingreso de divisas al país.