Wall Street abrió en rojo el lunes, atenta a las eventuales consecuencias de las elecciones en Alemania y Japón y siguiendo las intervenciones de dirigentes de la Reserva Federal.
El Dow Jones cedía 0,12% y el Nasdaq 0,36%.
El viernes, la Bolsa de Nueva York terminó en orden disperso, primando la prudencia ante tensiones geopolíticas con Corea del Norte y nuevos sobresaltos sobre la reforma del sistema de salud: el Dow Jones había perdido 0,04%, mientras que el Nasdaq subió 0,07%.