Caracas – «Nosotros estamos en default en este momento con Rusia y se tuvo que renegociar la deuda», precisa con preocupación el economista Ángel Alvarado, diputado a la Asamblea Nacional, al consultarle sobre la situación de la deuda que la República mantiene con Rusia y China. La citada renegociación se realizó en el último trimestre del pasado año 2016.
El diputado refiere que las acreencias con Rusia alcanzan los 6.5 mil millones de dólares.
«Con respecto a China tenemos una deuda que sobrepasa los 20 mil millones de dólares y estamos en un periodo de gracia hasta el año 2018», detalla Alvarado.
Estos elementos también llevan al economista a puntualizar que «ambas deudas están renegociadas y que ninguno de lo dos países (Rusia y China) tiene la capacidad de ayudar a Venezuela a refinanciar su deuda ( con otras naciones), recordemos que nuestro país es el más endeudado del mundo».
Tomando en cuenta esta situación, no será en las economías de Rusia o China donde el gobierno de Nicolás Maduro logre encontrar la tabla de salvación para seguir refinanciando su deuda con otros mercados.
Lo que busca Estados Unidos
«Estas sanciones no son contra Venezuela, ni contra los venezolanos, sino básicamente la manera cómo el Gobierno ha venido renegociando la deuda», aclara Alvarado.
«El Gobierno ha venido entregando activos de la nación en manos de Pdvsa, el Banco Central de Venezuela, el Banco de Venezuela, rematándolos a precio de gallina flaca y creando una deuda aún más onerosa para el país», explica.
Por esta razón el economista ahonda que el fin de Estados Unidos es evitar que el Gobierno siga contrayendo deuda a tasas excesivas y por eso «impide a Pdvsa emitir nueva deuda tal como ocurrió con el bono Pdvsa22».
