Para el economista Asdrúbal Oliveros en los mercados internacionales aún no se detiene la caída de producción petrolera lo que incide directamente en la capacidad que tiene Venezuela para afrontar sus dificultades económicas.
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Oliveros reveló que esta situación hace que Venezuela pierda «300 millones de dólares mensuales» que son necesarios para la nación.
Explicó además que el proceso administrativo del pago de los bonos se ha visto perjudicado debido a que ahora se han perdido las relaciones comerciales del Gobierno venezolano con bancos estadounidenses.
En cuanto al riesgo de incumplimiento en los pagos de la deuda el especialista reveló que «el fantasma del default se mantiene latente».
«La mayor preocupación del mercado fue en abril pero el gobierno ha venido cumpliendo con el pago de sus compromisos internacionales. Existen entre octubre y noviembre unos pagos importantes de la deuda, pero el default es un fantasma que se mantiene latente», dijo en una entrevista para Glovovisión.
Indicó que el Gobierno mantiene «cerrados los mercados, se están liquidando activos y recortando importaciones» para honrar esos pagos pendientes.
Explicó que cualquier alza del precio petrolero es positiva por cada dólar que aumenta recibimos buenos recursos, lamentablemente eso «no resuelve el problema a de fondo». «Venezuela necesita por lo menos precios petroleros por encima de los 60 dólares para recuperar su economía. Con el precio actual y en las condiciones actuales que tenemos entonces tenemos problemas de caja».
Sostuvo que el recorte de importaciones no se han detenido y ya ha caído por el orden de los 18 mil millones de dólares. «15 millones de dólares en importaciones en un nivel extremadamente bajo para Venezuela en las condiciones actuales del país», indicó.
Añadió que si no tienes dólares para importar «se potencia la conflictividad social y política».
Inflación
Según sus estimaciones hasta abril la inflación real estaría por el orden del 702 %. «La inflación es un drama social y es por ello que los jóvenes han salido a las calles a hacerse eco de las demandas de toda la población», dijo.
Para Oliveros aún no se puede hablar de hiperinflación en Venezuela pese a tener uno de los «índices de inflación más altos del mundo».
Nueva Constituyente
Calificó como una irresponsabilidad proponer una Constituyente en medio de un ambiente de alta conflictividad social.
«En economía la Constitución de 1999 tiene elementos en materia económica que pueden reformarse pero para ello no es necesario proponer una nueva constitución», reveló.
Sugirió que la propuesta de una Constituyente busca convertirse en un mecanismo «control social» contra la población.
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