Dos ingresos mínimos aumentados compran menos de 35% de la Canasta Básica

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Tarjeta Hogares de la Patria no ayuda mucho

Los economistas lo advierten de forma casi unánime: los aumentos salariales decretados unilateralmente por el Gobierno nacional, como ocurrió ayer, son inaguantables para algunos negocios, que se ven obligados a cerrar sus puertas o a reducir su nómina. Pero esa es solo una cara de la moneda, ya que el salario mínimo al mismo tiempo es misérrimo para los trabajadores.

El presidente Nicolás Maduro ha dicho hasta el hartazgo que el objetivo de los sucesivos incrementos es proteger el poder adquisitivo ante la «guerra económica» y la «inflación inducida». Sea artificial o no, el aumento de precios ha impedido que se cumpla este objetivo. La Canasta Básica Familiar en mayo llegó a costar Bs 1.426.363,38, según cálculos del Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM).

La cesta incluye todos los bienes y servicios esenciales para una familia promedio de cinco miembros. Si se asume que dos de ellos trabajan y cobran sueldo mínimo con su respectivo bono, al final de julio el ingreso de ese hogar será de Bs 501.062. Es decir, 35,13% de la cesta básica con precios de mayo.

Es poco lo que ayuda contar con una Tarjeta Hogares de la Patria. En ese caso, el ingreso familiar se elevará a 571.062, o 40,36% de la canasta del mes antepasado.

Lo más probable es que los rubros que componen la cesta hayan seguido subiendo de precio en junio. Este mes el alza se mantendrá, entre otras razones, por el incremento en los costos derivado del aumento salarial de ayer, de acuerdo con las advertencias de especialistas. Esto quiere decir que, para el momento en que se cobre el nuevo sueldo, el mismo podrá comprar un porcentaje de la canasta todavía menor al indicado aquí.