La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha confirmado que este martes iniciará una visita a Venezuela por «invitación» de la Asamblea Nacional, que preside Juan Guaidó, a pesar de que el Gobierno de Nicolás Maduro advirtiera de que no había autorizado la entrada de ninguna delegación vinculada a la Organización de Estados Americanos (OEA).
La CIDH ha informado en Twitter del inicio este martes de una visita de cinco días. «La agenda está focalizada en las víctimas de graves violaciones a los Derechos Humanos», ha explicado la organización en su mensaje, del que se hacen eco opositores al chavismo.
El propio Guaidó ha aplaudido públicamente la visita, en el marco de un contexto de «tortura, asesinato político, persecución a dirigentes sindicales, a diputados y a la prensa libre», con «cerca de 400 presos políticos» en las cárceles de Venezuela.
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El jefe de la Asamblea Nacional, que hace más de un año se autoproclamó presidente interino del país, ha afirmado que «Venezuela forma parte de la OEA y el sistema interamericano», por lo que si la «dictadura» de Maduro impide la visita de esta misión, «estaría infrigiendo los tratados internacionales».
El chavismo, por boca del presidente de la Asamblea Nacional Constituyente y ‘número dos’ del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, ha vuelto a criticar la visita, aunque ha evitado hablar de un posible veto. «No nos da ni frío ni calor que venga la CIDH», ha declarado durante un acto en Sucre, según la agencia oficial AVN.
La semana pasada, el ministro de Exteriores, Jorge Arreaza, avisó de que la visita «no está autorizada» y compartió una «clarificante» carta remitida a la CIDH el 27 de enero, en la que se alega que Venezuela no forma parte del organismo hemisférico desde el 27 de abril de 2019, fecha en la que entró en vigor la «denuncia» de la carta de la OEA.
El régimen chavista, añade Caracas, «desconoce y no otorga valor jurídico» a cualquier actuación que pueda emprender ante la CIDH y la OEA cualquier persona «que usurpe o pretenda usurpar la representación legítima» del Gobierno, en alusión al presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, y otros miembros de su equipo.
«La Asamblea Nacional no tiene competencia para actuar en nombre del Estado venezolano ante organismos internacionales de carácter intergubernamental, pues dicha atribución se encuentra reservada de manera exclusiva al Poder Ejecutivo Nacional», reza la carta.
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