A poco más de un mes de la reconversión monetaria ordenada por el Gobierno nacional, las autoridades monetarias se han mantenido firmes en su intención de retirar el cono monetario vigente para el 4 de junio y distribuir su reemplazo a partir de dicha fecha. Las advertencias de bancos y economistas sobre la inviabilidad de este proceso al parecer han caído en saco roto. En ese orden de ideas, el presidente del Banco Central de Venezuela, Ramón Lobo, reafirmó que los cajeros automáricos deberán tener los nuevos billetes disponibles para la fecha indicada.
Sin embargo, la posibilidad de que esta medida se ejecute luce remota. El economista y diputado a la Asamblea Nacional José Guerra ha advertido en reiteradas ocasiones que la calibración de la red de cajeros automáticos y otras máquinas para que reconozcan los nuevos billetes y los puedan dispensar demora al menos dos meses.
Se trata de un proceso tecnológico complejo, en el que las computadoras que manejan los cajeros deben ser reprogramadas para que lean correctamente los billetes nuevos.
A ello el parlamentario Guerra agregó los problemas en la distribución de las piezas entre los cajeros. Recordó que la flota del transporte de valores está mermada por la obsolescencia y problemas mecánicos.
Una nota del portal Crónica Uno alude a la reconversión monetaria de 2008 y recuerda que las instituciones financieras tuvieron casi un año para adaptar los sistemas contables y adecuar los cajeros automáticos, y las inversiones superaron los 40 millones de dólares. Hoy el patrimonio de la banca se encuentra mucho más mermado debido a la fuerte crisis económica.
«Fuentes financieras indican que el proceso de adecuación de los sistemas y de los cajeros será más engorroso, debido a que ahora hay una tecnología que no había hace 10 años y no se cuenta con suficiente personal capacitado para efectuar las modificaciones. A lo que se añade que la inversión es elevada y la adquisición de equipos se tiene que hacer fuera del país y hay restricciones en las asignaciones de divisas», se lee en la nota.
