Luis Prado, primer vicepresidente de Fedenaga, indicó que el consumo de carne per cápita aumentó dos kilos en comparación con 2021, pasando de seis a ocho por persona.
El gremialista insistió en que el sector cubre el 40% de las necesidades de la población y agregó que la falta de financiamientos y fallas de los servicios públicos afectan la actividad.
En cuanto a la distribución de la leche, explicó que está por debajo de las recomendaciones de la FAO, actualmente ronda los cuatro millones y medio de litros por día, producción que va principalmente a la creación de queso en fincas.
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En entrevista concedida para Unión Radio, Prado puntualizó que la carne venezolana, a pesar de ser de gran calidad, es una de las más económicas del mundo y la más barata del continente. Además, explicó que factores como la desaceleración de la hiperinflación y la salida, en parte, de esta, beneficiaron a la industria y a la recuperación de los estándares.
En temas de exportación precisó que los ganaderos no tienen control sobre esto y es manejado por comerciantes internacionales que desarrollan esta actividad.
En este mismo tema, los trabajadores buscan involucrarse de mejor manera en mercados internacionales.
«Ahora tenemos una deficiencia de mano de obra, se encuentran en el vecino país como Colombia o Ecuador. Esto afecta la mano de obra en el país y tenemos un déficit en ese sentido», comentó.
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