Comerciantes aseguran que les «llama la atención la gente que paga en Bs.»

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Hasta los pasajes de autobús se están pagando con billetes de un dólar en un país en el que la moneda nacional sufre habituales devaluaciones. Un fenómeno que se impone sin que el régimen chavista pueda hacer mucho.

Se ha vuelto común que en el autobús que cubre la ruta que va desde Caricuao a Plaza Venezuela, los usuarios paguen el pasaje con billetes de un dólar y reciban bolívares de vuelto.

Melissa Rodríguez, una estudiante de 22 años, habitante de este sector, lo ha visto en más de una ocasión. Ella, sin embargo, no es de las que pagan así: “No soy una persona que maneje dólares, no tengo billeteras electrónicas, ni nada de eso”, dice a El Tiempo.

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El último estudio de la firma macroeconómica, Ecoanalítica, revelaba que para octubre de 2019, 53,8% de las transacciones de todo el país eran hechas con una moneda distinta al bolívar y las estimaciones es que a finales de 2020 se extienda a un 70% de los venezolanos.

El tema es nacional, no solo en Caracas. De hecho, en el interior se da con mayor profundidad. Según un estudio de Datanálisis presentado en noviembre pasado, 86% de las transacciones ya se hacían en dólares en una ciudad como Maracaibo, mientras que en Caracas el promedio era de 45,8.

En cualquier caso, la dolarización se ha ido normalizando en Venezuela. En la universidad privada a la que asiste la joven Rodríguez, a diario ve a algunas personas que ni siquiera se manejan con bolívares. “Dólares es la única forma de pago que tienen y eso es normal. Ahora más bien llama la atención la gente que paga en bolívares”, cuenta.

Y no es algo de clases sociales. Son muchos los servicios que se están cotizando en dólares: una empleada doméstica puede cobrar 6 dólares por un día de trabajo; un cerrajero, 5 dólares por arreglar una puerta; y un taxista, 4 dólares por una carrera.

“Antes la gente se ofendía cuando le dabas el precio en dólares. Ahora es normal. No te ponen caras y lo entienden”, relata Elena González, desde su tienda de ropa para niños y adolescentes, ubicada en el sureste de Caracas.

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