Este miércoles, la jefa del Gobierno del Distrito Capital, Carolina Céstari y los militares del Estado Mayor para Caracas, sostuvieron una reunión con los propietarios y encargados de las panaderías de la parroquia Altagracia y allí les informaron acerca de un plan piloto para la venta de pan. En dicho encuentro no estaban los funcionarios de la Superintendencia de Precios Justos (Sundde).
Céstari les notificó a los panaderos que a partir de este jueves 23 de marzo tienen que actuar de manera coordinada con los Clap a fin de “garantizar la distribución justa del pan” y les ordenó elaborar solamente pan canilla, para lo cual tienen que emplear 90 % de la harina de trigo que reciban. El resto (10 %) puede ser para otros productos.
Esas canillas se entregarán a los Comités, que luego las venderán a los vecinos de la parroquia. Las familias de la zona podrán adquirir dos canillas diarias. Los pagos a los negocios serán posteriores, es decir, si la panadería dio el pan el jueves, el viernes se las cancelaría.
El precio de venta de la canilla estaría entre 200 y 250 bolívares, según lo indicado por la funcionaria. Aunque el organismo supervisor establece un precio menor, entre 150 y 200 bolívares.
Por esta razón, algunas panaderías ocupadas por los Clap dejaron de vender al público. Mansion’s Bakery, dejó de despachar pan salado al público y ahora destina 100% de su producción para el CLAP de la parroquia Altagracia.
La única opción para el consumidor común es el pan de auyama que, según un empleado, es lo que están ofreciendo en las mañanas.
La panadería, no obstante, permanece sin afluencia de clientes. Las pocas personas que están en el sitio son los encargados de recibir las bolsas llenas de panes, las cuales serán trasladadas a los comités de abastecimiento en vehículos particulares.
Con información de Crónica Uno
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