A través del el Decreto N° 4.080 de fecha 26 de diciembre de 2019, publicado en la Gaceta Oficial Extraordinaria 6.497 el Ejecutivo Nacional promueve la importación y la comercialización de bienes finales, beneficiando a empresas foráneas e intermediarios al tiempo que provocará el cierre de establecimientos industriales en el país, según revela el informe de Coyuntura Empresarial realizado por la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria)
El estudio realizado por el sector industrial destaca que con este Decreto, el Gobierno, lejos de alcanzar el objetivo que expresa en los considerandos de la referida norma, continúa contribuyendo, inequívocamente, al cierre de más establecimientos industriales, con el consecuente desempleo y disminución de exportaciones, en perjuicio del ingreso del grupo familiar y en la contracción aún mayor de la demanda de bienes producidos en Venezuela.
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Se destaca que a través de este decreto, el gobierno extendió la exoneración del impuesto de importación hasta el 30 de junio de 2020 y se exime del pago del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y la Tasa por Determinación del Régimen Aduanero a las importaciones definitivas de bienes muebles corporales, nuevos o usados.
El Análisis de Coyuntura Industrial advierte que el Ejecutivo Nacional eliminó 2918 Códigos Arancelarios correspondientes a materias primas, insumos intermedios y semimanufacturas, lo que afectará considerablemente al sector manufacturero.
En el área de la industria química, la materia prima necesaria para la elaboración de detergentes, fue suprimida de la exoneración, en textiles, también se suprimieron las fibras, filamentos e hilados de algodón, lana, de fibras sintéticas y artificiales, entre otros, imprescindibles para la fabricación de hilo, tejidos y confección.
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También se excluyeron de la industria papelera, de 17 subpartidas solo quedaron 3 que clasifican la pasta para la fabricación de papel, cartón y todas sus manufacturas, lo que evidentemente envía una señal de incentivo a la importación de estos productos ya elaborados, dañando la ya muy golpeada industria papelera nacional.
En cuanto el sector alimentos, se exoneraron bases para salsas y salsas preparadas: “ketchup”, mostaza, mayonesa, salsa de soya, entre otras. Se incorporaron productos a base de cacao, condimentos y concentrados de proteína en cápsulas (cubitos).
Según el informe, con esta medida, se incrementará aún más la obsolescencia de los equipos, con el consiguiente rezago tecnológico, ya que fueron suprimidas todas las maquinarias, aparatos, material eléctrico, instrumentos y aparatos de análisis y control, utilizados para la producción de bienes nacionales destinados al uso y consumo tanto del mercado interno como externo
Una medida cruel
Según el informe de Coyuntura Industrial, de 8288 subpartidas que fueron incluidas en la Resolución Conjunta del Ejecutivo fueron eliminados, 4.999 códigos arancelarios, lo que equivale al (60,32%), el 58,37% (2.918 subpartidas) corresponden a “materias primas, insumos, intermedios y semimanufacturas y de estos, 52% (1.523 subpartidas) se refiere a “productos químicos”, lo que afecta en gran medida al sector manufacturero en general, por ser el subsector químico de carácter transversal (insumos requeridos por la mayoría de los subsectores productivos).
Un 28,55% (1.427 subpartidas) se refiere a maquinarias, aparatos, material eléctrico, instrumentos y aparatos de análisis y control que también son requeridos por el sector industrial.
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