El economista Giorgio Cunto señaló que la inflación suministrada por la Asamblea Nacional es cónsona con la mayoría de los datos manejados por Ecoanalítica.
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Ante esto destacó que Venezuela continúa en hiperinflación y que «el ajuste fiscal llevado por el Ejecutivo busca una estabilidad del tipo de cambio con una restricción agresiva del crédito a costa de una recesión mucho más aguda».
Sumado a ello, explicó que existen restricciones muy grandes para reactivar un aparato productivo moribundo como el venezolano y que la dilatación de este escenario seguirá profundizándose por la migración a divisas como medio de pago principal.
Una de las consecuencias de que la intervención estatal se ha reducido es que se permitió de facto operar con divisas y por ende se dio paso a un proceso de dolarización informal que se convirtió en una válvula de escape de las distorsiones profundas que sufre la economía venezolana, apuntó el economista.
También expresó en su cuenta Twitter que decretar tarifas de servicios públicos artificialmente bajas, sin capacidad financiera para mantenerlas, explican en gran medida su deplorable estado.
«Lo gratis sale muy caro. Y en el caso de muchos lugares de Venezuela, el costo es el colapso de la civilización», escribió.
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