En el mejor de los casos, los caraqueños reciben agua por tuberías dos veces a la semana, según informó en rueda de prensa Jesús Armas, director de la ONG Monitor Ciudad.
La avenida San Martín de Caracas es una fuente improvisada, por la escasez del vital líquido por medios regulares, «Un señor comentaba que sus brazos no le daban para cargar a sus hijos luego de cargar agua», comentó a Descifrado el ingeniero Armas.
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Caraqueños invierten semanalmente 15 mil Bs. para adquirir agua, «son 60 mil bolívares al mes, superando el valor del salario mínimo establecido por Nicolás Maduro lo cual representa una violación clara a los derechos humanos». Además, detalló que las comunidades se han visto en la necesidad de recaudar $100 dólares para que les llegue un camión con cisterna a sus viviendas.
«Hidrocapital se convirtió en una empresa que en lugar de distribuir el agua, lo que está haciendo son malabares con las válvulas, tratando de abrir aquí y allá, según cómo la gente protesta, según cómo la gente reclama, y no tiene ni siquiera un calendario de racionamiento».
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