Las operaciones petroleras de Venezuela están casi todas suspendidas nuevamente esta semana en medio de apagones crónicos que llevaron a Nicolás Maduro a anunciar un racionamiento eléctrico en todo el país en abril.
De acuerdo con las estimaciones internas preliminares de Pdvsa de propiedad estatal, el promedio de producción de marzo en marzo podría ser tan bajo como 500,000 b / d, la mitad del promedio de febrero, teniendo en cuenta los múltiples días de producción cerrada debido al colapso de la red eléctrica en la cual la industria petrolera nacional se apoya, según reseña La Patilla.com.
Venezuela había estado produciendo alrededor de 1,2 millones de b / d en enero, antes de que Estados Unidos impusiera sanciones petroleras el 28 de enero. Las sanciones obligaron a Pdvsa y a sus socios a comenzar a detener parte de la producción para hacer frente a una acumulación de crudo para exportaciones resultante, una escasez de nafta para diluir su crudo pesado y restricciones de almacenamiento.
Cuando se produjo el primer apagón catastrófico el 7 de marzo, las operaciones petroleras, ya debilitadas, de Venezuela sufrieron otro golpe con paradas no planificadas en el complejo Jose, donde Pdvsa y sus socios extranjeros mejoran y combinan el crudo pesado del Orinoco para la exportación. Las operaciones de Jose se reiniciaron brevemente a mediados de marzo, pero se vieron obligadas a caer nuevamente cuando otro apagón barrió el país el 25 de marzo, y repetidamente desde entonces en fallas de transformadores. El suministro de energía en todo Venezuela ahora es intermitente en el mejor de los casos.
Los tres mejoradores operacionales liderados por Pdvsa, PetroPiar con Chevron, PetroMonagas con Rosneft y PetroCedeno con Total y Equinor, están suspendidos debido a los riesgos de seguridad y equipo.
“Estamos muy preocupados por la seguridad, y detenernos y comenzar son los momentos de mayor riesgo”, dijo a Argus un ejecutivo de uno de los proyectos de mejoramiento , lo que sugiere que es probable que la planta esté suspendida en este momento.
La planta de mezcla de crudo pesado Sinovensa de Pdvsa, que es operada por el socio estatal chino CNPC, ha logrado aumentar la producción gracias al limitado suministro de energía independiente. Los generadores de respaldo de los mejoradores están fuera de servicio, lo que los obliga a suministrarse de la red.
En un discurso televisado a nivel nacional antier, Maduro anunció 30 días de racionamiento para recuperarse de lo que su gobierno dice que es un sabotaje repetido de la red.
La empresa estatal de servicios públicos Corpoelec racionará la electricidad a nivel nacional en bloques rodantes en abril mientras repara los daños estructurales.
Y en un anuncio ayer en la tarde, Maduro nombró a Igor Gavidia como el nuevo ministro de electricidad y director ejecutivo de Corpoelec, en reemplazo de Luis Motta. Gavidia anteriormente se desempeñó como viceministro de la cartera de electricidad.
Los funcionarios de Corpoelec dijeron en privado que los apagones se originaron en un incendio de escobillas que provocó el primer apagón catastrófico el 7 de marzo, cortando el suministro del complejo hidroeléctrico Guri de 10GW que representa alrededor del 80% del suministro. Siguieron múltiples explosiones de transformadores mientras Corpoelec intentaba restaurar la energía, lo que llevó a una serie de cortes que comenzaron el 25 de marzo.
“Estamos en una situación muy grave”, dijo Maduro. “Los ataques fueron dirigidos contra el sistema de generación de Guri”.
Culpó a los “ataques electromagnéticos” perpetrados por fuerzas clandestinas de EE. UU. por hasta cinco apagones nacionales el mes pasado, incluidos tres apagones registrados en un período de 72 horas la semana pasada.
Millones de venezolanos no pudieron ver ni escuchar la alocución de Maduro debido a otro apagón antier, el quinto en un período de 24 días el mes pasado.
Actualmente “solo operan 6 GW o 17.5% de la capacidad de generación nacional de 34 GW de Corpoelec”, dijo un alto funcionario de Corpoelec en la sede de la compañía en Caracas. Señaló son “años de mantenimiento inadecuado y mala gestión por parte de gerentes no calificados”.
Según el rival de Maduro en la oposición, Juan Guaido, 14 de los 23 estados de Venezuela todavía no tienen energía. La mayoría también carecen de suministro municipal de agua asociada.
Tres altos funcionarios de Corpoelec le dijeron a Argus que el plan de racionamiento del gobierno no será suficiente para restablecer la electricidad.
Las explosiones de los transformadores por incendios forestales destruyeron la mayor parte de la subestación principal de Guri y sacaron de servicio las líneas de transmisión de 765 kV de las que depende Venezuela para la mayor parte de su suministro de electricidad. La reconstrucción de la subestación podría llevar meses, dijo un funcionario de Corpoelec con base en Guri. Las centrales termoeléctricas que normalmente se activan cuando el envío de hidroeléctricas no está disponible están fuera de servicio o carecen de materia prima para operar.
La red de Venezuela “finalmente se ha derrumbado por completo”, dijo el funcionario de Corpoelec. “Todo el país, incluida la mayor parte de la industria petrolera, dependía de Guri para obtener electricidad. Sufriremos en la oscuridad durante años gracias a la incompetencia y la corrupción del gobierno de Maduro”.
Maduro prometió que se restablecería la electricidad en mayo, pero un trabajador de Corpoelec y miembro de la junta del sindicato nacional de electricidad Fetraelec dice que Corpoelec ya no tiene los trabajadores calificados para reparar los equipos ni las piezas necesarias para llevar a cabo reparaciones mínimas en Guri.
“Casi 30.000 técnicos calificados de Corpoelec han dejado la compañía desde 2017 y sus reemplazos son contrataciones políticas no calificadas”, dijo el miembro de la junta.
Por Argus Media | Trducción libre del inglés por lapatilla.com
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