El pasado 11 de febrero un tanquero petroleo de Arabia Saudita identificado con las siglas ABQAIQ arribó al puerto de Jose, en el estado Anzoátegui, con la finalidad de cargar el petróleo venezolano y proceder a realizar los despachos correspondientes que tiene Venezuela que cumplir pese a las sanciones económicas que pesan sobre la administración de Nicolás Maduro por parte del gobierno estadounidense.
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Fuentes ligadas a la industria señalan que parte del convenio bilateral entre Arabia Saudita y Venezuela fue que el carguero debía llegar a tierras venezolanas con media carga, de forma tal que Venezuela llenaría el resto del cargamento. Es importante recordar que la producción petrolera venezolana podría caer a 900 mil b/d según las estimaciones de las fuentes secundarias.
La acción de Arabia podría ser parte de la respuesta a una misiva enviada por Nicolás Maduro al secretario general de la OPEP, Mohammad Barkindo, fechada el 29 de enero y a la que Reuters tuvo acceso.
“Nuestro país espera recibir la solidaridad y el apoyo total de los países miembros de la OPEP y su Conferencia ministerial, en la batalla que tenemos actualmente contra la intrusión ilegal y arbitraria de Estados Unidos en los asuntos internos de Venezuela”, escribió Maduro.
Busco “su firme apoyo y colaboración para denunciar conjuntamente y enfrentar este despojo descarado de (…) importantes activos de uno de los miembros de la OPEP”, añadió.
Maduro escribió que la OPEP debería ayudar a determinar posibles soluciones basadas en “el impacto que esta acción tiene en el mercado mundial de la energía y el riesgo que representa para los otros países (…) de esta organización”.
Pese a ello el senador de EE.UU. Rick Scott explicó que la Organización de países Exportadores de Petróleo (OPEP) no auxiliaría a Nicolás Maduro y añadió que las sanciones impuestas por Estados Unidos están funcionando. “Afortunadamente la OPEP no ha caído en la trampa. ¡Maduro, tu tiempo se acabó!”, publicó Scott en Twitter; luego de que presuntamente la organización declinara realizar una declaración a favor de Maduro.
India también estaría negociando con la revolución
El petrolero de bandera india Jag Laxmi partió de la refinería de Jose y se encuentra actualmente en ruta a la refinería de petróleo Pembroke en Gales. La empresa Valero Energy, con sede en San Antonio Texas, quienes operan la refinería de petróleo Pembroke de 220,000 barriles por día. Se espera que el petrolero llegue entre el 25 de febrero y el 1 de marzo según la empresa de localización de buques en vivo marine traffic.
Jag Laxmi, petrolero de crudo del Great Eastern Shipping con base en Mumbai, partió den ruta hacia Cul de Sac en Santa Lucía. La terminal petrolera Hess de Cul-de-Sac es propiedad de Buckeye Partners, con sede en Houston. Luego procedió a trasladarse a Milford Haven para continuar su camino a Gales.
Por su parte las negociaciones abiertas con India reafirman todas estas transacciones una vez que Manuel Quevedo, presidente de Petróleos de Venezuela (PDVSA) viajó a Nueva Delhi para concretar la venta de hidrocarburos “a los niveles que tenemos actualmente con China”, aseguró el ministro de Petróleo venezolano y presidente de PDVSA. “Tenemos compromisos en la actualidad con la India de 366.000 barriles por día, nosotros queremos llevar esa meta, muy pronto, al menos al doble”.
De igual forma se mantienen abiertas las reuniones con el mercado asiático convirtiéndo a China, India y Rusia en los principales aliados comerciales de Venezuela bajo las riendas de Maduro; tres potencias se mantienen como «aliadas» pese a la presión norteamericana.
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