El presidente de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela, Carlos Alberto González reconoció que solo se está trabajando entre 5 a 7 % de la capacidad instalada de la producción de nuevos inmuebles.
Dijo que “a final de año no pasamos de 3 mil unidades de viviendas, cuando eso lo hacía un productor privado en un una sola obra».
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Todas las operaciones del sector inmobiliario se basan en el mercado secundario, que son las viviendas existencias. Reconoció que han bajado los precios en dólares y bolívares, «simplemente uno es un intermediario y lo que se ven más afectados son los propietarios. El mercado se ha puesto cada vez más pequeño”.
Dijo que si no se detiene la hiperinflación se mantendrá la crisis no solo en este mercado inmobiliario sino en toda la economía.
