Comenzaron pidiendo 5%. Luego 100%. Pero los vendedores de efectivo en Zulia no se conforman. Quieren más. Ahora debitan hasta 350% por cada avance de efectivo que realizan en la ciudad.
La urgencia de algunos para obtener efectivo alcanza límites insospechados. Mélida Labarca, de San Francisco, debía viajar y tenía su monedero vacío. Luego de tocar todas las puertas, sin obtener resultados, recurrió a un vendedor de estupefacientes. «Sentí mucho miedo porque sabía en lo que me estaba metiendo, pero era eso o no viajar. Aunque la persona no vende dinero, me cambió por encima de 200%», relató.
En un colegio de la parroquia Raúl Leoni, las maestras «desfilaban» por el salón de segundo grado. La razón: uno de los estudiantes llevaba, diariamente, Bs 300 mil en efectivo para desayunar. «Todo el mundo preguntaba por él. Las docentes le compraban la comida con punto y se quedaban con la plata. Era inaguantable y por eso se le pidió a los padres que no le dieran más dinero», aseguró una representante.
Como si hubiese caminado sobre brasas, Denis Rosales llega a su casa a las 4:00 de la tarde. No desayunó y tampoco almorzó, condicionado por la premura de llegar al banco a tiempo para cobrar su pensión. Una vez más, fue insuficiente el sacrificio que emprendió desde las 3:00 de la madrugada: no recibió efectivo.
«Cuando faltaban 10 personas para mi turno, se terminó el dinero. No es posible salir con las manos vacías después de haber hecho 10 horas de cola. No tengo para comprar comida y por puntos de venta me ‘sacan los ojos'», comentó en un autobús. En general, los bancos dan 20 mil, 50 mil o 100 mil bolívares por día, en el mejor de los casos.
Con información de Panorama.
