La hiperinflación golpea duro. Tanto que líderes de opinión que hasta hace poco se dedicaban solo a la política, hoy en día están pidiendo que el tema económico se lleve a la mesa de diálogo de Santo Domingo, República Dominicana, según reseña un artículo de opinión publicado en el portal Venepress.
¿Cuánto tiempo tuvo que pasar para que se reconociera que el problema económico no es menos que el político?
Tan solo 10 meses después de la llegada al poder del Presidente Hugo Chávez, las señales ya generaban alerta. Decisiones populistas en materia automotriz, hipotecaria, financiera, hacían vislumbrar el camino que se comenzaba a transitar. No hubo un día que la prensa económica, en ese entonces con mayor libertad, no reflejará, denunciara, advirtiera sobre las decisiones que estaban preparando el terreno de la hiperinflación. Luego del denominado “paro petrolero” los controles fueron incrementándose, socavando poco a poco las bases del aparato productivo nacional. Mientras esto ocurría, en el área política se observaba el ascenso de Hugo Chávez en la región, la abundancia de los ingresos petroleros por razones geopolíticas como siempre, hicieron que no solo los seguidores de la Revolución sintieran que el bienestar era infinito, aún a costa de los gruesos errores económicos.
Cuando comenzó a evidenciarse la escasez de manera más contundente en 2015, algunos fueron abriendo los ojos… pero resulta que hace 8 años ya se registraban conatos de escasez severa, pues una vez al año faltaba por más de un mes la carne, el pollo, el café, las caraotas y la leche. La gente comenzó a preocuparse más de la economía y los líderes de opinión y políticos comenzaron a darse cuenta que podía rendirle dividendos incluirla en sus discursos.
Y así fuimos llegando a este escenario de hiperinflación concepto que muchos puristas siguen discutiendo si aplica o no en el país, pero que el bolsillo no tiene dudas de que exista.
El último informe del 20/11 de Torino Capital, institución que ha mostrado una posición moderada en cuanto a la economía venezolana reporta “la inflación mensual en octubre alcanzó 25,5%, estabilizándose en la misma tasa observada en septiembre. No obstante, la variación interanual del índice de precios continuó acelerándose y alcanzó un nuevo récord de 815% contra 754% en septiembre…la inflación de octubre registró su propia marca, al ser la segunda medición mensual más alta de la serie. Además, es mucho más alta que el promedio mensual del año de 20,6%. La data muestra cierta aceleración también en la serie ajustada por estacionalidad, subiendo 1,6 puntos porcentuales a 24,4%, la variación más alta después de la de agosto”.
La variación de precios diaria y hasta por horas ha generado en algunos líderes de opinión una especie de Epifanía, al darse cuenta que “no se puede seguir viviendo así “o “Hay que llevar el tema económico a Dominicana” por tan solo citar algunos comentarios. Pues bienvenida sea esa Epifanía en tiempos críticos que solo se requiere sumar voluntades.
Ginette González
